La Educación Financiera en Perú: Clave para el Crecimiento Económico

¿Qué es la Educación Financiera?

La Educación Financiera en Perú; la educación financiera es el conjunto de conocimientos, habilidades y actitudes que permiten a las personas tomar decisiones informadas y responsables sobre sus finanzas personales y familiares. La educación financiera contribuye a mejorar el bienestar económico y social de las personas, así como a fomentar la inclusión y el desarrollo financiero de los países.

En Perú, la educación financiera es un tema pendiente y un desafío para el sector público y privado. Según el estudio de S&P Global FinLit Survey 2014, solo el 24% de los peruanos adultos poseen un buen nivel de educación financiera, lo que los ubica en el séptimo lugar de la región latinoamericana. Además, según la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO) 2019, solo el 40% de los peruanos adultos tienen algún producto financiero, como una cuenta de ahorros, un crédito o un seguro. Esta cifra está por debajo del promedio regional y mundial.

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La falta de educación financiera limita las oportunidades y las capacidades de las personas para acceder y usar adecuadamente los servicios financieros que ofrecen el sistema bancario y otras instituciones. Esto afecta especialmente a los sectores más vulnerables de la población, como los jóvenes, las mujeres, los emprendedores y los habitantes de las zonas rurales. Asimismo, la falta de educación financiera dificulta el desarrollo del mercado financiero y la estabilidad macroeconómica del país.

Iniciativas que Impulsan la Educación Financiera en Perú

Por estas razones, es necesario impulsar iniciativas que promuevan la educación financiera en Perú desde una perspectiva integral y articulada. Algunas de estas iniciativas son:

  • El Plan Nacional de Educación Financiera (PLANEF), que es una política pública impulsada por el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) con el apoyo de diversas entidades públicas y privadas. El PLANEF tiene como objetivo mejorar los niveles de educación financiera de la población peruana mediante acciones coordinadas y sostenibles en los ámbitos formal, no formal e informal.
  • La Estrategia Nacional de Inclusión Financiera (ENIF), que es una hoja de ruta para lograr que más peruanos accedan y usen los servicios financieros que necesitan para mejorar su calidad de vida. La ENIF plantea cuatro ejes estratégicos: infraestructura financiera, oferta de productos financieros, demanda efectiva y protección al consumidor financiero.
  • Los programas e iniciativas de educación financiera desarrollados por el sector privado, especialmente por las entidades financieras, las organizaciones no gubernamentales y las fundaciones. Estos programas e iniciativas buscan brindar información, orientación y capacitación a diversos segmentos de la población, como escolares, universitarios, emprendedores, microempresarios y mujeres.
    • Algunos ejemplos son: la Semana de la Educación Financiera organizada por BBVA, Alfi y Semana Económica; el programa Más Allá del Dinero financiado por el banco HSBC; el programa Bancos en Acción financiado por la fundación Citi; el programa Economía para el Éxito de Junior Achievement Worldwide (JAW); y el concurso escolar del Banco Central de Reserva del Perú.

Conclusión

La educación financiera en Perú es clave para el crecimiento económico del país, ya que permite mejorar el bienestar de las personas, aumentar la inclusión financiera, fortalecer el mercado financiero y promover la estabilidad macroeconómica. Por ello, es importante que todos los actores involucrados en este tema trabajen de manera coordinada y comprometida para lograr que más peruanos tengan acceso a una educación financiera de calidad.

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